Acer, la tercera marca de ordenadores en tamaño, entró en el creciente mercado de los teléfonos inteligentes con el lanzamiento de sus primeros ocho modelos en el Congreso Mundial de Móviles de Barcelona.
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Estamos entrando seriamente en este espacio" dijo Aymar de Lencquesaing, director de la unidad de teléfonos inteligentes de Acer, en una rueda de prensa, añadiendo que la compañía quiere estar entre los cinco primeros fabricantes de este tipo de aparatos en cinco años.
Acer es la última de una serie de compañías que lanzan su propia línea de teléfonos inteligentes, mientras que su rival Asustek ha anunciado recientemente una alianza con Garner, fabricante de dispositivos de navegación.
La compañía afirmó el lunes que espera que el negocio, su primer acercamiento a los teléfonos móviles, suponga el 10 por ciento en sus ingresos de 2012, ya que el mercado de los portátiles y de los móviles sofisticados empieza a ser difícil.
El mercado de los 'smartphones' se ha saturado bastante en los últimos dos años, habiendo escalado Apple, Research in Motion y HTC a costa del principal proveedor, Nokia.
"Creemos que podemos ser uno de los cinco principales. Y a lo largo del tiempo espero que podamos ser más que eso", dijo Lencquesaing.
Explicó que Acer quería invertir en el desarrollo del negocio antes de que sea rentable.
"Creo que va a llevarnos a donde sea entre tres y cinco años", explicó. "Ser del tamaño que somos nos da un presupuesto de marketing considerable. Sabemos que tenemos que gastar para crear la imagen de que Acer no es sólo una marca de ordenadores", añadió.
Acer pretende desarrollar el negocio utilizando sus ventas en el sector del portátil. También empleará su gran escala para bajar los precios de algunos componentes, explicó Lencquesaing.
WINDOWS A BORDO, ANDROID SOBRE LA MESA
Acer explicó que ocho de los nuevos teléfonos utilizarían software de Microsoft, pero que también estaba considerando el sistema Android de Google.
"Hay gran interés en los dispositivos Android, y nosotros también creemos en ello", afirmó.
Acer espera que los modelos más baratos cuesten 49 euros, apoyados por los subsidios de los operadores, mientras que los más caros valdrán alrededor de 500 euros si no tienen ayudas.
"Este es un paso que muestra realmente al mercado que no están jugando con uno o dos dispositivos (...) Parece que van en serio", dijo Francisco Jerónimo, analista de IDC.
Se espera que el sector de los teléfonos 3G sea uno de los que más destaquen dentro de la industria tecnológica en 2009 y que crezca en un 10-20 por ciento, aunque la crisis mine la demanda de las compras de aparatos tecnológicos y afecte a la línea de base de las empresas tecnológicas.
Aún así, muchos analistas señalan que el sector ya está saturado y que los que entren de nuevas pueden tenerlo difícil para hacerlo en la cadena de suministros.
"Será algo duro para ellos llegar a los usuarios. No tienen marcas conocidas en el mercado de los móviles", explicó Jerónimo.
"Probablemente tendrán una pequeña proporción del mercado en uno o dos años, pero es un buen primer paso", añadió.
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