La Plataforma Tecnológica Europea de la Energía Eólica (TPWind) afirma, en su última agenda estratégica de investigación (SRA), que la energía eólica tiene el potencial para cubrir, antes de 2030, el 28% de la demanda de electricidad de la UE. Sin embargo, la Secretaría de la TPWind señala que, para cumplir este objetivo, tanto las autoridades políticas como los principales agentes del sector deberán planear y poner en práctica acciones estratégicas en el ámbito de la investigación de tecnologías y políticas.
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TpWind explica en su SRA que el desarrollo de la energía eólica se producirá en tres etapas. Entre ahora y 2020 (es decir, en la primera etapa), es posible que la energía eólica llegue a cubrir casi el 15% de las necesidades de los consumidores de la UE, siendo la capacidad instalada total de 180 gigavatios/hora. Esta capacidad podría crecer hasta los 300 gigavatios/hora entre 2020 y 2030 (segunda etapa). Por último, la tercera etapa tendría como objetivo primordial incrementar las exportaciones europeas de energía eólica.
En la SRA se señala que la movilización de la investigación privada y de los recursos públicos en Europa (que se conseguirá mediante la coordinación de la inversión a escala tanto regional como nacional) ayudará a Europa a afrontar las dificultades de tipo tecnológico e industrial. Esta reciente SRA ofrece a los europeos una guía de las prioridades y las acciones en el terreno de la investigación que deben materializarse para garantizar el desarrollo del sector energético.
Una de las secciones de la SRA está dedicada a una estrategia de implantación en el mercado. En ella se evalúa lo que puede hacerse para eliminar las barreras comerciales para el uso y el funcionamiento a gran escala de la energía eólica. Diversos métodos se han puesto sobre la mesa, entre ellos recortar drásticamente los costes de inversión, habilitar el acceso a mallas energéticas y agilizar la burocracia.
«La visión de futuro de TPWind y su plan de acción para la investigación, según se exponen en la SRA, constituyen pasos de enorme importancia para la futura implantación de la energía eólica en Europa», afirmó Henning Kruse, presidente de TPWind. «Ahora ha llegado el momento de empezar a llevar a la práctica este plan de acción, y en este empeño sin duda marcará la diferencia el apoyo de la Comisión Europea y los Estados miembros.»
Como impulsora de la energía eólica, la plataforma TPWind brinda apoyo para el desarrollo de políticas eficaces a nivel comunitario y nacional orientadas al fortalecimiento de los mercados y a la cooperación en el desarrollo tecnológico por medio de la innovación, sin olvidar los proyectos de investigación y desarrollo, tanto los nuevos como los que ya están en marcha. En resumidas cuentas, toda esta labor conducirá a que los precios de las tecnologías alternativas para la producción de energía sean más competitivos. TPWind se puso en marcha en 2006 y está coordinada por la Asociación Europea de Energía Eólica (EWEA). Su intensa actividad se centra en concretar proyectos de investigación y rebajar los costes asociados a la producción de la energía eólica.
Este tipo de energía es la opción preferente de Europa en lo que se refiere a tecnología para la producción de energía renovable debido a la creciente inquietud por lo que está ocurriéndole al planeta. Cabe señalar que la industria europea es la que lleva las riendas del mercado internacional. El agotamiento del petróleo y el gas y los efectos del cambio climático sobre la Tierra son un quebradero de cabeza constante no sólo para la industria y el mercado, sino también para la población. Según los datos más recientes, el consumo y el desarrollo industrial de la energía eólica permitirá a Europa emitir casi 600 toneladas métricas menos de dióxido de carbono al año
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