La mancha investigada. (Foto: Glen Jackson)
(NC&T) Mientras examinaba el sitio, en un edificio seco y ventilado, donde 30 años atrás fue hallada muerta una mujer, el investigador Glen Jackson de la Universidad de Ohio y sus colegas descubrieron adipocira (ácidos grasos compuestos principalmente por sales de calcio). Hasta este estudio, los forenses solo habían encontrado esta clase de evidencia de descomposición humana en ambientes anaeróbicos y húmedos, como por ejemplo en los casos en que los cuerpos han permanecido largo tiempo sumergidos en agua o sepultados bajo tierra.
Este descubrimiento podría ser tal para los forenses que buscan evidencias en la escena de un crimen.
Para la ciencia forense, el desarrollo de investigaciones científicas que permitan conocer más sobre la descomposición humana, es útil, y puede traducirse en una labor más eficaz ante los casos de asesinatos a resolver.
Jackson, Carolyn Zimmermann y Unige Laskay, llevaron a cabo el estudio para intentar despejar el misterio alrededor de una muerte en el hospital mental estatal en Atenas, Ohio. Después de que una paciente desapareciera, los empleados realizaron búsquedas exhaustivas de la mujer. Más de un mes después, un empleado descubrío su cuerpo tendido sobre el pavimento de hormigón, cerca de una ventana, en un ala abandonada del edificio. Una autopsia reveló que la mujer había muerto por causas naturales y que el cuerpo se había estado descomponiendo durante varias semanas.
Aunque se retiró el cadáver y se limpio el sitio, el pavimento de hormigón donde fue encontrada la paciente adquirió una mancha blanca distintiva con la silueta del cuerpo de la mujer. La extraña marca ha intrigado al personal anterior y al actual del edificio, el cual pertenece ahora a la Universidad de Ohio y es utilizado para oficinas, estudios y un museo de arte. La mancha se encuentra ubicada en una porción no utilizada del edificio que está cerrada al público.
La mancha nunca había sido identificada o explicada químicamente, hasta ahora. Jackson llevó a cabo un nuevo análisis científico debido a que el caso proporcionaba una oportunidad excepcional para determinar si los investigadores forenses pueden identificar restos humanos en un sitio donde no hay presencia de ADN o de otras evidencias físicas.
Después de analizar muestras, los investigadores determinaron que la mancha de color claro con forma de silueta humana fue producida por una combinación entre la degradación de la piel o del tejido graso del cuerpo descompuesto y productos químicos que son parte de la composición del limpiador Blu-Lite. El estudio contradice afirmaciones anteriores de que la mancha es un negativo fotográfico del cuerpo de la mujer inducido por la luz solar.
Pero la química forense no puede explicar todo acerca de la misteriosa mancha, apunta Jackson. Para que apareciera la imagen blanca con la silueta de la fallecida, alguien tuvo que haber fregado el área de manera inusualmente minuciosa con limpiador Blu-Lite, o quiz otro compuesto acido, ya que una limpieza mas general con una mapa habría dejado una mancha química mas grande y errática en el pavimento.
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