La inflamación pulmonar por causa de infecciones como la gripe puede que deje de preocuparnos en un futuro con los últimos avances conseguidos en esta área. Los tratamientos que podrían mitigar estas inflamaciones pueden estar al llegar gracias a un descubrimiento realizado por un equipo de investigadores del Imperial College de Londres (Reino Unido). Los descubrimientos del estudio se han publicado en la revista Nature Immunology.
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La investigación ha demostrado que no es el virus en sí el que acentúa los síntomas de la gripe, sino la reacción del sistema inmunológico al virus. Aunque el virus tiene la capacidad de abandonar el cuerpo tan rápido como aparece, el cuerpo puede seguir padeciendo los síntomas de la presencia del agente durante días y el sistema inmunológico puede seguir actuando para derrotar al virus en los pulmones.
Está claro que el poder aniquilador del sistema inmunológico es un factor crucial en la lucha contra el virus, pero los problemas aparecen cuando el sistema reacciona en exceso y provoca un daño mayor al organismo. En el caso de la infección gripal, para cuando el sistema inmunológico termina su trabajo, los pulmones están inflamados, con lo que se bloquean las vías respiratorias y se experimentan dificultades para respirar.
Este último estudio ha demostrado que el receptor llamado «CD200R», junto con la molécula CD200, asegura la actividad normal de las células inmunológicas en los pulmones. Estos contienen un elevado nivel de CD200R que puede limitar la respuesta del sistema inmunológico y detener la inflamación justo después de que ésta comience. Los estudios demostraron que la gripe no sólo desactiva las moléculas CD200, sino que los receptores CD200R no logran impedir que el sistema inmunológico reaccione en exceso. ¿El resultado? Una inflamación pulmonar.
El equipo científico administró a ratones infectados con la gripe un sustituto que imitaba la CD200 o un anticuerpo que estimulara los CD200R. El objetivo consistía en comprobar si con ello conseguían controlar la respuesta del sistema inmunológico y reducir la inflamación, según explicaron.
Se observó que los ratones que recibieron el tratamiento perdieron menos peso que los ratones de control y la inflamación sufrida en las vías respiratorias y en el tejido pulmonar fue menor. El equipo afirmó que el virus de la gripe fue expulsado de los pulmones en una semana y que la capacidad del sistema inmunológico de combatirlo no se vio afectada.
Los investigadores tienen depositadas muchas esperanzas en estos descubrimientos y en que desemboquen en la creación de un tratamiento relacionado con la CD200R que desactive el sistema inmunológico en el momento preciso. Este tratamiento podría suavizar los síntomas y contribuir a detener una reacción excesiva del sistema inmunológico.
«El sistema inmunológico es muy complejo y normalmente combate perfectamente las infecciones, pero también tiene capacidad para causar mucho daño si reacciona en exceso», señaló la profesora Tracy Hussell, autora principal de este estudio y miembro del Instituto Nacional del Pulmón y el Corazón, perteneciente al Imperial College de Londres. «Nuestra nueva investigación todavía se encuentra en un estado incipiente, pero estos descubrimientos sugieren que es posible prevenir la sobreactuación del sistema inmunológico y limitar el daño innecesario que puede causar.»
Este estudio fue respaldado por la Unión Europea, el Consejo de Investigación Médica del Reino Unido, el Wellcome Trust y los Institutos Nacionales de la Salud de los Estados Unidos.
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