Un detalle de la firma de Hitler.
El Centro Wiesenthal avala un documento como la primera carta antisemita escrita por el líder nazi en 1919.
Así empezó el nazismo: un veterano de la Primera Guerra Mundial llamado Adolf Hitler que lanza una arenga cargada de antisemitismo a sus compañeros de frustración. Un oficial que le pide que ponga por escritas sus ideas. Unos folios escritos en 1919 y conocidos desde entonces como la Carta a Heimlich, su destinatario. Remite, Adolf Hitler.
El documento en cuestión ha sido objeto de intrigas. Entre otras cosas, porque existe un submercado de documentos y objetos relacionados con Hitler lleno de falsificaciones y equívocos. Sin embargo, el Centro Simon Wiesenthal de Los Ángeles (que lleva el nombre del cazanazis austriaco y que honra a las víctimas del Holocausto) asegura ahora que cuenta con todos los informes que garantizan la autenticidad de la copia original de la carta que tiene entre sus fondos. En julio, el centro expondrá por primera vez el documento.
Según informa 'The New York Times', la aparición de esta copia original relegaría a la categoría de copia el documento hasta ahora conocido de la carta, custodiado por los Archivos Estatales de Baviera.
En realidad, la copia de Los Ángeles está en el mercado desde 1988. Según el intermediario que hizo la venta, la carta apareció entre los escombros de una sede del Partido Nazi cerca de Nueremberg, cuando los soldados estadounidenses avanzaban hacia Berlín. Aunque existían informes que validaban la firma de Hitler en la carta, había dudas sobre su originalidad, ya que la carta estaba mecanografiada, un lujo para la época que parecía inaccesible para un soldado como Hitler.
Sin embargo, en las últimas fechas se ha descubierto que Hitler estuvo empleado en esos meses en un servicio de propaganda del Ejército alemán, por lo que pudo acceder a una máquina de escribir..
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